Natalí Otero (35 años), la fotógrafa que retrata a los ‘Abuelos’: “Todos merecemos ser vistos y escuchados”

14.06.2025
La fotógrafa Natalí Otero (en el centro arriba) entre varios retratos de su 'Proyecto Abuelos'
La fotógrafa Natalí Otero (en el centro arriba) entre varios retratos de su 'Proyecto Abuelos'

La fotógrafa de 'Proyecto Abuelos' revaloriza la importancia del intercambio intergeneracional y la escucha sin prisas. Un trabajo fotográfico que comenzó a sus veinte años inspirada por sus propios abuelos, en San Genaro, provincia de Santa Fe, y que fue declarado de Interés en su ciudad. Con cada persona mayor retratada logra visibilizar historias de vida y sensibilizar a miles de seguidores en las redes sociales.

Ella es Iris para quien no la conoce. Estas son fotos de hace muchos años. Como siempre cuento. con ellos arranque mi proyecto de abuelos. A veces me dicen que no les diga a todos abuelos (por que no todos quieren serlo). Pero es como decirles gracias y te amo en una sola palabra, de acá solo es la única intención. Este proyecto se iba a llamar "Iris", pero lo quise hacer más general ya que en mi vida tuve la suerte de siempre tener el amor de ellos y de personas mayores que eran como mis abuelos. A mis abuelos los visitaba todos los días. Las tardes y el mate eran ya un ritual. Los fines de semana cuando salía de trabajar de un boliche el cual era fotógrafa, pasaba por la panadería del pueblo "caseros", les compraba una bandeja y se las dejaba en la puerta para cuando se levanten. Siempre nos acompañamos. El estar haciendo estas fotos con otros abuelos me reconforta como cada encuentro con los míos. Mi intención es darles visibilidad, no olvidarnos de su ternura y que sean escuchados. ✨️ Por que todos en algún momento vamos a ser ellos. Dediquen un tiempo a sus abuelos, siempre. Con amor, Natalí. 

Natalí es su nombre, aunque muchos piensen que le quitó la 'a' final, no. Su madre eligió ese nombre por una canción que escuchó en la radio. Y suena tan melodioso como ella misma cuando habla. Una artista de 35 años que dice no poder vivir alejada de la naturaleza. Por eso se queda en San Genaro, con sus dos perritas y cerca de la familia. Aunque vivir de la fotografía allí no resulta nada fácil, Natalí no deja de pergeñar proyectos artísticos, mientras trabaja como creadora de contenidos y sigue mimando a su 'Proyecto Abuelos'. Una serie de retratos a personas mayores que nació con sus propios abuelos y que, además de ser Declarado de Interés, ha conseguido mucha notoriedad en Instagram. 

En Historias Mayores quisimos conocerla para saber más sobre esta idea que surgió hace unos 12 años y que continúa descubriendo la ternura y la empatía a través de sus preciosas fotografías. A través de una videollamada, Natalí afirma que "el mensaje es la importancia de ser visto, de ser escuchado, más con las personas grandes". 

"Cuando uno realmente se detiene por un momento a escuchar no se da cuenta de lo que está haciendo por el otro... no son solo las fotos o videos, sino lo que viene después", sostiene la fotógrafa que cree que "es el hecho del cariño que uno tiene como presente a la hora de escuchar las historias de los demás".

Sus imágenes destilan el amor y la buena comunicación con sus protagonistas. La artista los aborda de manera intuitiva y espontánea y a veces con mucha timidez. Así conoció a "Ninito", un hombre de más de 70 años que vende plantines por la ciudad de Rosario y anda por todos lados con su bicicleta. Nino asegura que la gente se le acerca más y que puede vender mucho más después de las fotos que le hizo Natalí

"Entonces, lo que más me impactó es que siempre quise poder como dar una mano, ayudar, y con él lo concreté, digamos. Y eso es lo que más me impactó, el hecho de que estas fotos no quedaron solamente en eso, sino que fueron para alguien más una puerta que se abrió para mejorar su calidad de vida", reflexiona la artista que mantiene la amistad con Nino. 

Desde lo artístico, la fotógrafa destaca su trabajo con una señora vecina a la que quiso retratar desde el momento en que la vio. Así que le pidió permiso a su hija e improvisaron una sesión en el patio de su casa. "Parecen de estudio, pero no", explica Natalí que quedó asombrada por todas las expresiones que pude capturar. Esa imagen formó parte de la muestra colectiva 'Expuestas' organizada en Mar del Plata por FEEM fotógrafas en el mundo. Una de las pocas exhibiciones físicas de cara al público que tuvo su 'Proyecto Abuelos' que a pesar de ser tan valorado y premiado, aún no tuvo una exposición individual. 

Sobre cómo ve el trato a las personas mayores a su alrededor, Natalí responde que "nos centramos en que el cambio está afuera... En que el gobierno o toda la gente que se tiene que hacer cargo, sí, se tienen que hacer cargo. Pero, ¿qué te cuesta a vos escuchar a una persona, ayudar al que tenés al lado desde lo que podés? Yo diría que, más allá de lo que me corresponda o no, es lo que a mí me hace bien también", afirma. 

Y sobre esta realidad sigue reflexionando: "Si en tu cuadra tenés personas mayores que necesitan una mano, ¿por qué vas a esperar que la sociedad cambie, que a veces se pone el motus de la sociedad para un poco alejar el tema, me parece. Y con suerte algunos, o no, vamos a llegar a viejos, entonces me parece que en vez de mirar la vejez con tanta lejanía, no, acercate un poco más y no esperes que la sociedad cambie".

Natalí asegura que siente afinidad por las personas mayores desde que era muy pequeña. Seguramente por la relación con sus abuelos maternos, con los que mantuvo una relación muy cercana y de los que guarda preciosos recuerdos y enseñanzas.

"Mi abuela era una persona muy especial, por eso cuando falleció me lo puse también como una meta a este proyecto. Después se fue dando de manera más espontánea. Lo iba a hacer en conmemoración a ella, retratando a personas que pudieran reflejarla. Después se abrió de otras formas y siempre dejo como que lo espontáneo me vaya también guiando un poco. Pero Iris, era una persona muy pícara. Tuvo vivencias muy duras y siempre estuvo haciéndonos reír. Mi abuela me enseñó a reírme hasta en los momentos que no da a reírse porque es muy difícil. Pero que en esa enseñanza es como esa frase que digo siempre Reíte, tu alegría me hace bien. Y mi abuelo era tapicero, un artesano. Entonces de él aprendí mucho sobre la calma, sobre música le gustaba mucho el tango, con ellos también aprendí que el amor o el cariño no siempre vienen de los lugares que se esperan o que tienen que ser, si no que hay personas que están ahí para demostrarlo y que son esas curitas que uno no imagina que van a estar ahí desde ese lugar. Y por eso también empecé este proyecto, para demostrar el cariño, la ternura que te demuestran los abuelos y enseñanzas tengo un montón".